Silueta ámbar
En la tarde llana de
mis recuerdos
aparece brillante luz
de flama
¿Eres tú, silueta
ámbar
que con tus ojos
intensos
enciendes en mí la
llama?
Lánzame al vacío de
tu amor
Caer en ti no importa
nada
¡Lejos, lánzame lejos!,
Que si he de estar
muriendo
que sea a la luz de
tu mirada.
No resisto, no,
recordar el abrazo
del adiós,
la humedad de tus
labios que me besan,
el perfume de tu
aliento que exclamaba:
¡Ámame, no partas mi
corazón en dos!
Y yo imbécil fui, lo
digo.
Tristezas y vació
sólo hallé
al cambiar el cielo por
infierno
en la ausencia de tus
brazos,
de tu aliento y piel
de lino.
Eternos momentos
cruzan lentamente
en estas neuronas
mías
que sólo en ti saben
pensar
y transcurren así los
días, meses, años
bajo el manto de
noches frías.
Silueta ámbar,
aparece.
No como fantasma en
mis recuerdos.
Y llena este vacío herrumbroso
con gotas cristalinas
de tu amor
que hagan desparecer
mis miedos.
Silueta ámbar, ¡vete!
Recordarte no puedo
resistir.
Descubre en capas mi
corazón
o quédate y fuerte
abrázame
porque en medio no
puedo vivir, yo.
Silueta ámbar,
¡desaparece!
¡Si no has de
arrebatar mi aliento!
¡Si no has de darme
vida!
¿Por qué te apareces
en mi mente?
¿Por qué me inquietas
día a día?
Anselmo Bautista López.
Marzo 24, 2012.
Editamos, publicamos y promovemos tu libro.
Visítanos: http://editorialatreyo.yolasite.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Haga aquí su comentario.