sábado, 24 de marzo de 2012

Silueta ámbar



Silueta ámbar




















En la tarde llana de mis recuerdos
aparece brillante luz de flama
¿Eres tú, silueta ámbar
que con tus ojos intensos
enciendes en mí la llama?

Lánzame al vacío de tu amor
Caer en ti no importa nada
¡Lejos, lánzame lejos!,
Que si he de estar muriendo
que sea a la luz de tu mirada.

No resisto, no,
recordar el abrazo del adiós,
la humedad de tus labios que me besan,
el perfume de tu aliento que exclamaba:
¡Ámame, no partas mi corazón en dos!

Y yo imbécil fui, lo digo.
Tristezas y vació sólo hallé
al cambiar el cielo por infierno
en la ausencia de tus brazos,
de tu aliento y piel de lino.

Eternos momentos cruzan lentamente
en estas neuronas mías
que sólo en ti saben pensar
y transcurren así los días, meses, años
bajo el manto de noches frías.

Silueta ámbar, aparece.
No como fantasma en mis recuerdos.
Y llena este vacío herrumbroso
con gotas cristalinas de tu amor
que hagan desparecer mis miedos.

Silueta ámbar, ¡vete!
Recordarte no puedo resistir.
Descubre en capas mi corazón
o quédate y fuerte abrázame
porque en medio no puedo vivir, yo.

Silueta ámbar, ¡desaparece!
¡Si no has de arrebatar mi aliento!
¡Si no has de darme vida!
¿Por qué te apareces en mi mente?
¿Por qué me inquietas día a día?


                                                              Anselmo Bautista López.
                                                                            Marzo 24, 2012.

 



Editamos, publicamos y promovemos tu libro. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Haga aquí su comentario.